• Proponerse tomar al menos un vaso de agua antes del desayuno, antes de comer, antes de merendar y otro antes de cenar.
• No esperar a sentir sed para beber.
• Tener presente una botellita con el propósito de fomentarse el consumo de agua.
• Aumentar el consumo de frutas y verduras, ya que poseen un alto contenido de
agua.
• Mantener las bebidas a temperatura ambiente para beber más.
• Niños y ancianos son los que presentan mayor riesgos de deshidratación, por lo
que se recomienda incentivar la ingesta en estos grupos
• Es recomendable optar por bebidas cero calorías antes de consumir las que
contienen azúcar, ya que favorecerán el aumento de peso. Es necesario aumentar la ingesta de líquidos en época de calor.
• Otra opción saludable es hacerse jarras de té, de diversas hierbas y sabores.
Contribuye a una buena hidratación y bienestar.
• Tomar 8 vasos como mínimo de agua como referencia a las recomendaciones.
• El agua es importante para el bienestar, ayuda a la digestión, ayuda a eliminar las
toxinas del cuerpo, hidrata la piel manteniéndola más joven y como no tiene
calorías, ayuda en la pérdida de peso. Beber agua en familia, para dar el ejemplo a
los más pequeños.
• Llevar la cuenta de qué y cuánto se bebe en un día.
• Intentar afianzar el hábito aumentando la ingesta durante dos semanas.
• Prestar atención al color de la orina. Más oscuro más deshidratada/o estoy.
• Incluir siempre en la mesa una jarra con agua.
• Beber agua antes, durante y después de la actividad física